viernes, 10 de junio de 2011

El titere


El títere

Dentro de un mundo muy oscuro, yace un niño llorando. No puede detener sus lágrimas pero al dejar de llorar por un segundo, ve que sus manos se extienden solas. Estas están atadas por unos hilos y levemente se comienza a mover, así obligándole a bailar. Él puede escuchar entre risas y carcajadas mientras está bailando, pero al detenerse sólo escucha un silencio muy doloroso. Él se dio cuenta que su existencia sirve para matar el aburrimiento de las demás personas, como un simple payaso, cuando las personas ya dejan de estar aburridas lo dejan como un trapo sucio. Él dependía siempre de una persona. Harto de ser dependiente, corta las cuerdas que lo ataban y comenzó a escapar de su titiritero, pero no podía ver si estaba lejos o cerca de él. El muchacho aun así siguió corriendo sin rumbo, dentro de un mundo oscuro en donde no podía ver en que dirección iba.
El niño, cansado de correr, se detiene para descansar. Inmediatamente las lágrimas comienzan a brotarle desde el fondo de su corazón. En medio de su dolor, no se dejaba de repetir: "Mi padre tenia razón, en este mundo no hay amigos sino conocidos; debí ser primero yo, segundo yo y tercero. Soy un idiota". Cada vez que se repetía así mismo dicha frase, más se hundía en ese mar de sus oscuros recuerdos, que lo ahogaban en la oscuridad de su corazón. Despues, a medida que se adentraba mas y mas en la oscuridad poco a poco comenzaron a desaparecer las ganas de seguir en ese mundo que era muy negro por donde lo viese. Estaba cansado de la misma gente que lo rodeaba, de las falsas caras que le sonreían, de todo. Entonces alguien se acerca, es una persona que le extiende la mano. El niño levanta su mirada, pero no logra ver su rostro. Del miedo oculta su mirada triste de ese ente que estaba al frente. Esa persona le pregunta: “¿Por qué lloras?” El chico no encuentra respuesta alguna y comienza a murmurar: “Mi padre tenía razón, en este mundo no hay amigos solo conocido”. El ente se acerca al chico, le toca los hombros y lo abraza. Este le responde: “Tal vez la tenga o tal vez no; en este mundo hay varias clases de personas, son pocas a la que podemos llamar amigo”. Después el niño murmura: Primero yo, segundo yo y tercero yo. Al escuchar tal frase, el ente responde:"Nunca debes ser egoísta con los demás. Brinda la ayuda a quien lo necesite, defiende lo que amas y valora tu vida; eso debe se prioridad para ti", entonces él niño aun confundido le dice: "Es mejor desaparecer de este mundo, porque me hace daño". Él acaricia la cabeza del niño y le responde:" Morir nunca debe ser una opción, seria huir de los problemas" , lo levanta y comienza alar de su mano mientras que le dice: "La opinión de los demás debe valerte mierda. Sé una roca frente de los insultos, una espada para cortar lo que te agobia, un escudo para proteger a quienes amas y sobre todo… sé tú mismo y sácate esa mascara". En el fondo de ese largo camino, se puede ver una pequeña luz. El niño asombrado le pregunta: "¿Y cómo podré lograrlo?" y cuando llegan a la recta final del camino, le responde: "Cuando tengas mi edad, lo sabrás" y el niño puede mirar que se dibuja una gran sonrisa en el rostro de aquel sujeto. Al atravesar la luz, logra despertar y se da cuenta que todo era un sueño. Se levanta de su cama y se dirige al baño a lavarse la cara. Cuando ve su faz reflejado en el espejo, mira a aquella persona que lo ayudó a salir de ese mundo oscuro y sólo atina a reir. Fin.

No hay comentarios:

Publicar un comentario